La máquina que cosía sola...
Con motivo de la celebración de Halloween, hemos traído una noticia de miedo y misterio, de esta forma queremos ligar el mundo del bordado con la festividad más terrorífica del año.
Se cuenta que hace 50 años en un pueblo llamado Isso, una máquina de coser se ponía sola a funcionar, ante la presencia de diversos testigos. Tenemos que aclarar que se trataba de una máquina de coser Agfa, y que para ponerla en funcionamiento hacía falta darle con los pies sin parar a su gran pedal de hierro forjado.
La historia cuenta que durante la guerra civil, una mujer cayó enferma, ofreciéndole un manto a la Virgen del Carmen si sanaba de su enfermedad. Así que la mujer sanó, del mismo modo, recolectó el dinero suficiente para mandar a hacer el manto. Pero finalmente, decidió comprar una máquina de coser y, con lo que ganase cosiendo, bordaría un manto .
El relato tiene un mal final, ya que la mujer volvió a caer enferma y murió. La familia vendió la máquina, comprándola una familia ajena de Almería (aunque más tarde esta familia se trasladó a Albacete por motivos de la guerra). Así, siguiendo la historia, esta familia debería cumplir con la promesa que hizo la mujer enferma que compró la máquina: debían de hacerle o comprarle un manto a la virgen.
Por circunstancias de la vida, esta mujer cayó enferma y no pudo terminar de coser el manto, por lo que la leyenda cuenta que a partir de ese momento, la máquina comenzó a coser sola y no pararía hasta que no se terminara de coser el manto, terminado la promesa que hizo la mujer a la virgen.
Como no podía ser de otro modo, a día de hoy nadie conoce dónde se encuentra esta máquina... ¿se encenderá tu máquina de bordar sola esta noche?